domingo, 8 de marzo de 2009

¿La Bolsa no para de caer. Que hago?


¿Por qué un cisne negro puede arruinar nuestra inversión?

Hasta que el descubrimiento de Australia la humanidad creía que todos los cisnes eran blancos.
La existencia de un cisne negro no solamente suponía la prueba de que todas las creencias habían sido falsas sino que da nombre a un acontecimiento absolutamente imprevisible que cambia el curso de la historia. Si no habéis leído el libro de Nassim Nicholas Taleb “The Black Swan” os lo recomiendo como lectura. Leerlo te hace descubrir una vez más que incluso lo mayores expertos en una determinada área de conocimiento son absolutamente incapaces de adivinar el futuro. Porqué centramos demasiado nuestro conocimiento en la información que tenemos, no la que no tenemos.
Y es precisamente esta última la que suele propiciar fenómenos difícilmente predecibles. Imposible anticipar el éxito de “Google” o los atentados del “11S”, imposible detectar con precisión cual va a ser la próxima gran moda o qué acontecimiento social se convertirá en fenómeno cultural, o cuando vamos a salir de la crisis, o finalmente cual es el momento en invertir parte de nuestros ahorros en Bolsa.
Nassim Taleb es un famoso “especulador” del mercado de derivados, y en este libro. Black Swan por su lado analiza la naturaleza de los acontecimientos altamente improbables. Taleb argumenta que hay tres características comunes a estos acontecimientos (ó “cisnes negros”): son impredecibles, generan un tremendo impacto, y después de que han ocurrido inventamos teorías para explicarlos y justificar su existencia. El ataque de las torres gemelas por parte de Al-Qaeda es un ejemplo perfecto.
Taleb considera que los mercados financieros minusvaloran la probabilidad de movimientos extremos y quiere obtener ganancias apostando a que tales sucesos extraños tan impactantes de hecho sucederán con mucha mayor frecuencia. La manera en que hace esas apuestas es mediante la compra de opciones que son muy baratas pero que pueden proporcionar un retorno espectacular si los mercados se vuelven locos.
Sus críticos apuntan que el cisne negro podría tardar demasiado tiempo en materializarse, ó podría no ser lo suficientemente significativo como para generar una ganancia neta. Yo pienso que eso se acerca más a jugar a la lotería que a invertir coherentemente.
De hecho, no es casualidad que alguien como Taleb (brillante, sin miedo a dar su opinión, sin miedo a ser diferente, intelectual) haya emergido del mundo de los derivados. Algunos detractores piensan que es un charlatán, a mi me recuerdan sus ideas con las que Burton G Malkiel conmocionó la Bolsa al decir en los años 80 que un mono acertaría en sus inversiones igual o más que el mejor de los analistas en su famoso libro “ Paseo aleatorio por Wall Street” al afirmar que los mercados son eficientes y aleatorios.
Lo cierto es que estas teorías tan controvertidas han vendido muchos libros y también suscitados muchos debates, y que la creatividad de los autores han aumentado en mucho sus cuentas corrientes y la de sus editores.
No os puedo decir cuando subirá la bolsa, pero tarde o temprano lo hará, y será una gran oportunidad. Aunque a Taleb no le importa si sube o baja, sino que sea muy volátil i impredecible.

A estas alturas todavia no es recomendable entrar, paro los que esteis invertidos en ella, ya es tarde os ha pillado el "cisne negro".

1 comentario:

Anónimo dijo...

aHORA SUBE NO?